lunes, 2 de mayo de 2011

Las diferentes propuestas de encuadernación


Hemos asistido ya a varios bazares de diseño independiente porque es algo que disfrutamos. Es agradable conocer a gente con una creatividad desbordada para elaborar de todo. Más de una ocasión nos hemos sentido entusiasmadas por una bolsa, una playera, una blusa, un cochinito... etc.
También hemos conocido otras propuestas de encuadernación - nuestra competencia - y, a decir verdad, nos entusiasma mucho ver que hay cosas interesantes, algunas en verdad bellas, otras súper originales, unas más novedosas que otras, y que todos cabemos dentro de este movimiento que se hace llamar el "diseño independiente".
Un poco también viendo a otros hemos reflexionado acerca de lo que a nosotros nos caracteriza mejor: la unicidad de nuestras piezas. Y es que, a pesar de ver tantísimas libretas hermosas, bien logradas y bien presentadas, la mayor parte de las veces se nota que fueron hechas un poco como en serie. Por dentro todas son iguales, con el mismo papel, con la misma propuesta, y sólo varían en lo que le ponen por fuera. Nuestro proceso es al revés, nosotras ideamos cada pieza desde el inicio y le elegimos el papel idóneo (rayado, de color, ross, libre de ácido, cartulina, hecho a mano, opalina) que siempre está en función de lo que queremos lograr con cada una. Después lo doblamos, lo cosemos, le elegimos los materiales que más le vayan y vamos configurando objetos que son un poquito más que eso, ya que sabemos que casi siempre tendrán un valor especial para quien los posea.
Todo el tiempo decimos que no hacemos más de 3 libretas iguales, pero la verdad es que, además de que nunca hemos hecho 3 iguales, decir eso es un poco mentira, porque cada una tiene su propio proceso irrepetible, sus propias ganas de ir existiendo a través de nuestras manos, y eso se nota desde el inicio.